Cuando es necesaria una multitud de docentes

x Alejandro Baroni


Pero esta manera de pensar por sistemas, o sea por razonamientos hechos de antemano, se va haciendo cada vez más difícil y peligrosa a medida que se trata cosas más complejas; y en los órdenes de la moral, y de la psicología, y en la literatura, en la filosofía, en lo social, y en muy amplio grado en lo práctico, entonces … lo del texto; esto es: los peligros de pensar por sistemas, y la conveniencia de pensar por ideas para tener en cuenta y con ellas examinar cada cuestión y del modo más amplio
Carlos Vaz Ferreira en Lógica Viva

Luego de una primera lectura y a cuenta si vale del Libro Abierto - buena titulación – de EDUY21, van aquí algunos comentarios referidos exclusivamente a la educación entre los once y dieciocho años de edad.

El Libro Abierto, Primera versión: Propuestas para apoyar el acuerdo educativo es un trabajo dirigido por sociólogos, de la veta funcional estructuralista y con agregado sistémica. Están convencidos de su nuevo "paradigma", confían en sus ideas y han estudiado resultados.  “Esencialmente, creemos que hemos errado en un modelo de cambio por partes y fragmentos. Deberíamos estructurar una propuesta de cambio educativo sistémico, transversal a los niveles educativos, profundo, estructural, planificado, y con metas, proyecciones, calendario de transformaciones y cuyo centro sean los procesos de enseñanza y de aprendizaje” (p.36).
Afirman los autores que estamos bajo “impactos” de la cuarta revolución industrial, pero “la inspiración curricular de la educación media en Uruguay proviene históricamente de un modelo anclado en la tradición iluminista, pensado para la segunda revolución industrial” (p.41). Sin embargo, sus planteamientos permanecen aún en la familia del iluminismo, con esfuerzos intelectuales infructuosos por evitarlo: proponen un único “modelo” regulador, sustentado en el pilar de una enorme confianza en la locomotora correcta y adecuada de sus ideas.
Desde la tapa del libro, donde dice “Propuestas para apoyar el acuerdo educativo” se plantea la voluntad de un “acuerdo”. Por ahora, aparece como probable que el tal acuerdo involucre a algunos partidos, subsectores políticos y figuras intelectuales vinculadas o interesadas en la educación, que intentan convencer de la bondad de la propuesta. No están a la vista acuerdos con quienes podrían ejecutarla ni aparecen los necesarios liderazgos intelectuales o político – educacionales.
EDUY21 impulsa una concepción que orienta las prácticas desde una perspectiva humanista, con foco en la personalización y apuntalamiento temprano de los aprendizajes, así como en la detección de dificultades, la experimentación, la flexibilidad curricular, la interdisciplinariedad, el trabajo en proyectos, y la integración de aspectos de la vida de los estudiantes en las propuestas de enseñanza” (p.80). La preocupación por el ser humano, personalizado o no, no  es exclusiva de las tradiciones “humanistas”, vocabulario con muchos matices y genealogías con aires de familia religiosos. Al comienzo del siglo 21, las relocalizaciones de lo metafísico y “natural” desde las deidades hacia “el ser humano”, ya deberían estar dejando paso a visiones con foco en las prácticas humanas y con preocupaciones ambientales.

Tal vez para evitar la exposición de  diferencias internas – es ruidoso el silencio acerca de la laicidad -  en el Libro Abierto se exponen fotos, se historia poco las experiencias vividas, sólo se menciona el plan 2008, y es notoria la invisibilidad de la experiencia encabezada por Germán Rama[1] que contuvo similitudes con su propuesta. No se menciona evidencias en las escuelas e institutos de la Universidad del Trabajo, donde aumentó la matrícula y demanda por inscripción y hay un escaso abandono curricular. No se responde a la pregunta de si la UTU de hoy se alinea con la segunda revolución industrial. Se expresa repetidamente el juicio incómodo para muchos innovadores practicantes docentes y trabajadores sociales actuales de que las experiencias exitosas o no tanto fueron carentes de un "sistema", algo así como de una apuesta general preconcebida, o calificándolas implícitamente de falta de “largo alcance”. Tajantemente: “No son sustentables en términos de desarrollo de la educación procesos de planificación de corto alcance que, además, son modificados  sustancialmente ante la asunción de cada nueva administración del sistema educativo” (p.36).

Llamó la atención que con el tremendo diagrama de barras de pérdida de horas por ausentismo docente a la vista, no se haya incluído un estudio psicosocial de las faltas justificadas y no justificadas ¿Qué pasa? Si son más mujeres, si hay dificultades por género, son más hombres, cuáles son las justificaciones mayoritarias ¿Por qué tantos docentes, aún eligiendo su lugar de trabajo, el centro educativo, cada año según su preferencia – algo excepcional en el mundo laboral – producen tanto ausentismo? ¿Por qué tanto ausentismo por paros sindicales, cuando las asambleas cuentan con bajo quórum y desconformidad? ¿Por qué no aparecen agrupaciones sindicales de docentes con orientaciones que puedan explicar que aún el 6% del PBI para la educación puede ser insuficiente si no se adoptan otras decisiones didácticas e institucionales, como es volcar las/os mejores a trabajar en contextos “críticos”?
¿Se buscaron diagnósticos psicosociales e institucionales de los centros educativos? ¿Se distinguieron las escuelas técnicas de los liceos? Problemas que evidencian los docentes, rechazos, cuáles sanciones hubieron, investigaciones de conflictos ¿se miraron procesos, planificaciones en liceos del interior, diferencias interior vs montevideo, rural vs urbano? ¿Experiencias destacables? En el ambiente internacional, más allá de evaluaciones estandarizadas, ¿se evaluaron experiencias de grupos estudiantiles, sus tutores y mentores en concursos fuera de fronteras? ¿Cómo hicieron para embarcar a la Directora?

Decía el psicólogo institucional Carlos Saavedra [2] en 1997: “Pensando más en términos de psicología social: ¿por qué aprende uno? Aprende por dos cosas: por la estructura de la enseñanza y aprende por la relación que establece con los enseñantes, que es muy importante. Aquello de que el profesor de Matemática de primer año era macanudo y Matemática era una papa y en segundo año nos tocó aquella otra profesora que era una inmundicia y no entendíamos nada ¿Qué pasó allí? Se jugó algo en el plano de la relación. Lo que posibilita cualquier aprendizaje, aquello sobre lo cual camina, es el vínculo”.

Si hay un visible problema de ausentismo docente que es necesario investigar, si existen los síntomas de estar quemados por la institución, la burocracia, edificios inadecuados o lo que fuera, o por las situaciones personales (burn out), un tipo de  problemas que han recibido atención y soluciones en diversas tareas laborales como es por ejemplo los servicios de salud, ¿se ha investigado a quienes ocupan cargos de dirección? ¿Se ha recogido sus angustias, comentarios y propuestas?  Para algunos estudiosos constituyen la figura clave. En una carta a la Ministra María Julia Muñoz se proponía un concurso para Directores de Liceos .

Parece ser que al Libro abierto le falta concreción – aunque haya planes[3] - y sobra "paradigma". La definición dada pinta claramente una dificultad. “A los efectos de este documento, entendemos por paradigma la capacidad efectiva de responder a desafíos y problemas sustentada en un cuerpo de valores, creencias, conocimiento y procedimiento que justifican y otorgan sentido a determinados cursos de acción”. Un paradigma no es capacidad efectiva, podría ser enunciado de valores, vueltas de tuerca en conocimientos y procedimientos, pero la capacidad “efectiva” está en los actores, en la acción pedagógica, administrativa y civil.  En sus estudios sobre las evoluciones y revoluciones científicas, Thomas S. Kuhn descubre (o absorbe) la idea de "paradigma" y lo introduce en el vocabulario de las ciencias sociales. Luego de ello escribió La estructura de las revoluciones científicas[4] en un rato. Kantiano en ese momento, la estructura y el paradigma ganaron allí al estudio histórico concreto y a la coexistencia de acciones e ideas que no se regulan por un sistema a priori. Es extremadamente difícil adoptar a Einstein cuando las velocidades de vida son bajas en el liceo y el barrio, así que Newton no muere. El salto de una “segunda” a una “cuarta” revolución industrial no debería decretarse.  No puede desatenderse la formación en competencias manuales entonces, pues de ellas dependen muchas sobrevivencias y paradas de olla. Pero vale apuntar bien: Kuhn era epistemólogo (o filósofo de la ciencia) allí, hablaba del conocimiento científico, no de "estructuras educativas" y, no menos pertinente, historiaba la ciencia para formular filosofía de ciencia, no al revés. Carlos Vaz Ferreira puede ayudar aquí: “Imagínense Ustedes que un Kant no nos hubiera dado solamente su sistematización; imagínense que pudiéramos hoy saber, no sólo de las divisiones que hizo Kant, cómo separó su espíritu en compartimientos, cómo puso tabiques y cómo dijo que A era esto, que B era lo otro y que C se dividía en primero, segundo y tercero, sino que hubiéramos sabido lo que Kant dudaba, y lo que Kant ignoraba; y sobre todo cómo ignoraba: cuán provechoso nos sería esto, para fermento pensante. Las teorías de Kant han hecho su bien; han hecho también su mal; y ha llegado un momento en que han dejado tal vez de ser útiles para la humanidad; pero aquel fermento pensante hubiera sido de utilidad eterna. Si pudiéramos ver la franja psicológica, la penumbra, el halo, lo que hay alrededor de lo absolutamente claro; si pudiéramos saber hoy, por ejemplo, cómo piensa un Bergson, qué dudas tiene, en qué contradicciones se ve a veces envuelto (de las que se salva con tal o cual artificio de lógica…) Ése era el “libro futuro”; y eso ha de comprender la filosofía futura…”

Más  allá del enamoramiento de un pensamiento por sistemas - ese tan desaconsejado por unilateral por Carlos Vaz Ferreira en su apartado del libro Lógica viva “Pensar por sistemas y por ideas a tener en cuenta” - de la falta de un relato histórico explicativo o la falta de mención a la laicidad, de la necesidad de más investigaciones concretas, de la expresiva foto masculina en su presentación, el Libro abierto contiene aportes y estudios relevantes. Y uno de ellos es la preocupación por el apoyo a las comunidades educativas, por una supuestamente implícita unificación de la escuela técnica con el liceo, otro es el querer frenar el actual impulso hacia una mayor desigualdad, el señalamiento de determinados procesos que no pueden continuar como están, la puesta en foco de los procesos de aprendizaje, el tener claro que es necesaria una mayor financiación para una mejor educación que puede ser con un 5, 6 o 10% del PBI, dependiendo de lo que se quiera hacer. 

El plan PROMEJORA, elogiado por EDUY21, tenía el objetivo de asesorar, acompañar y apoyar proyectos de cambio en diversos centros educativos. Se podría dar aquí una intervención y conformar Centros educativos visitantes, con sus ómnibus y equipamientos en laboratorios, talleres, herramientas, medios digitales de comunicación y didácticas, con sus equipos docentes viajeros, seleccionados por exigentes concursos que incorporen Dirección, docentes de “humanísticas”, “ciencias”, “soldadura”, “robótica”, etc., “artes”, “deportes” de alto nivel, psicólogas sociales e institucionales, trabajadores sociales, equipos transdisciplinarios, investigadores invitados con vocación de relatar sus experiencias en las comunidades, docentes con experiencias innovadoras a cuestas, con una remuneración  adecuada, bastante mayor que la de convenios vigentes. Podrían estacionar su bus durante algunos meses, al lado de determinados centros, de diferentes contextos – sin excluir los “críticos” –  manteniendo la superintendencia en manos de la Dirección del local inmueble, y previa investigación concreta de las condiciones del instituto elegido, ofrecer su colaboración en consenso con la comunidad educativa local. Por su participación, el centro educativo locatario podría recibir beneficios económicos y lo mismo sus docentes por participar en la experiencia, quienes además de una mayor remuneración, sumarían beneficiosamente en su currículum. Se podría disfrutar entonces de la estudiante que suelda metales, programa algoritmos de inteligencia artificial, ejecuta música y redacta poesía.
También podría ser útil crear nuevas  o reforzar  figuras pedagógicas . Hay muchos docentes que ya transversalizan sus conocimientos y potencian su trabajo que esperan para ser visibilizados.

Transitar por ideas que no impliquen acuerdos políticos por ahora inviables, o decisiones legales, administrativas ni paradigmáticas difíciles de tomar, moviendo piezas a cambio de mejoras psicológicas, institucionales, económicas, sumando para la multitud docente necesaria, puede ser el camino.
 
Dicho de otra manera, mientras no haya una cantidad de docentes entusiasta intelectual y afectivamente, renovada en sus capacidades e iniciativas desde el aula y asamblea, el sistema que sea, el actual o el que venga, conseguirá su subsistencia. Mientras tanto, igual será apedreado por las/ los vitalmente impacientes por educar.

Agradezco los comentarios de José Miguel Busquets, en especial el relacionado con la formación técnica y su transición, y de Graciela Gómez Palacios, constructora de paradigmas prácticos, adelantada en la generación de comunidades educativas vinculadas a su barrio, contexto e instituciones de la sociedad civil.

[1] Entrevista a Carlos Saavedra, librevista nº 15, verano1997, pp. 11-13. Dice Saavedra: “las instituciones tienen discursos a múltiples niveles, una especie de mil hojas que se superponen una sobre otra., pero además, no tienen discursos individuales. Sí hay sujetos que hablan, pero los discursos no son individuales: por boca de un individuo, hablan las instituciones. Por ejemplo, no es que el Profesor Rama sea autoritario, sino que la concepción de la enseñanza a nivel nacional es autoritaria, la institución está teñida de autoritarismo y el Profesor Rama encastra perfecto, como horma para el zapato”. p.13  http://www.librevista.com/numero-15.html

[2] Ibidem, librevista nº 15

[3] Se plantea un Marco Curricular Nacional (MCN) que básicamente empodera el centro educativo liberándolo de un centralismo excesivo, la formación por competencias, la creación de la figura del tutor pedagógico, la transdisciplinariedad, y un sistema de evaluación de resultados, proponiéndose vueltas de tuerca institucionales respecto a la situación actual. El sustento legal estaría dado por una nueva Ley de Educación y la aprobación de nuevos Estatuto Docente y Estatuto de Centro Educativo.
La metodología de formulación de un marco conceptual no es diferente de la del Marco Curricular de Referencia Nacional (MCRN) del CODICEN publicado en el 2017, que presenta énfasis diferentes. Se define también como un documento “abierto” y elaborado con intervención de asambleas técnico docentes, donde se subraya la educación “común, sin anular diferencias”, se menciona la búsqueda de una “mirada ética” ubicando allí a unas ética de pensamiento”, “ética de bienestar y “ética ciudadana”, la formación en “competencias culturalmente densas”, y referencias expresas a la “laicidad”, “diversidad” e “inclusión. La base legal para el MCRN es la Ley de Educación Nº 18.437  (2009)

[4] T.S.Kuhn, La estructura de la revoluciones científicas, Fondo de Cultura Económica, México, 1971

 

 

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